lunes, 4 de marzo de 2013

La voz negra en Estados Unidos.


Entrar a Estados Unidos siendo parte del Programa de intercambio cultural y profesional de “Mujeres en acción” que se desarrolla desde 1940, que integra a mujeres líderes de 54 países del mundo en temas de: Política, Economía, Derechos Humanos, Género y Justicia, ha significado para mí todo un reto y un despertar de muchas emociones. Por supuesto que no es lo mismo ingresar al país con una visa especial de intercambio cultura J-1, las puertas se abren de par en par, reconociendo esta mi condición de poder frente a otras mujeres migrantes que han salido de sus países con la intención de mejorar su condición económica y social y la de sus familias, intentaré compartir desde la mirada de mi realidad y mis ideas.

El no hablar ni gota de inglés, sino el básico el de supervivencia: black cofee, water, excuseme, thanks, orange juicie o el hello, ha significado un reto cotidiano en donde mi capacidad de creatividad en la comunicación ha hecho derroche, desde dibujar una maleta con un carril, para intentar preguntar a mi vecina de viaje, quién no sabía ni gota de español,  si escucho ¿en qué carril retiraba mi maleta? Hasta hacer la mímica de una ala de pollo para pedir alitas picantes, es maravilloso como ante esta barrera del idioma existe otras tantas desde el cuerpo, la vista, las señas o los dibujos, esa comunicación no verbalizada, pero efectiva.

Pienso en los millones de latinoamericanas que interactúan y socializan en estas condiciones, desde allí ya es constante el grado de exclusión, en Washington D.C la primera ciudad que visite se habla muy poco español, escuchar todo el día hablar inglés ha sido aturdidor y apabullante.

Uno de los intérpretes nos explicaba que existe una población significativa de Salvadoreños y Afro- descendientes, hasta ahora para mí han sido menos visibles, veo más integrada a esta vida ordenada, de aparente felicidad y sentido de bienestar a las personas con el fenotipo anglosajón, haciendo ejercicios, con un vaso de café descartable en las calles y en puestos de poder político. Los afro -descendientes y Salvadoreños se encuentran más en puesto de servicio, meseras, conductores de autobuses o en Tiendas.

Hoy también estuvimos en los principales monumentos del centro de la ciudad, el imperio muestra toda su fuerza, grandes imponentes estatuas y monumentos a los principales presidentes- hombres, con uso de un gran espacio físico, así como lo hace el imperio de la iglesia católica, por la fuerza simbólica que tiene D.C pregunte: ¿Qué donde estaba reflejada en los monumentos la participación de las mujeres? Me han dicho que no han tenido mujeres presidentes, pero ese no es el único ejercicio del poder político y las mujeres nos hemos destacado en muchas áreas y en Estados Unidos en todo la lucha de las sufragistas, pero ellas no tienen grandes monumentos al menos en Washington D.C no lo vi.
Monumento a Abraham Lincoln su mano izquierda empuñada en señal de firmeza.
Dato curioso hasta hace 1 año se inauguró un monumento a Martín Luter King ¿Porqué será? un amigo dice: "que hay personas que siguen siendo igual de peligrosas muertas"  obvio que no tiene la presencia física de los demás, la de los Presidentes, pero este tiene mucha fuerza es una piedra y el Martin Luter King se desprende de esa piedra, reflejando la lucha por la igualdad de los y las negras, solo que está pintada toda de blanco, allí ya no parece tan reivindicativo, negra hubiera sido más hermosa.

Por otra parte me desconcentra tanto los procedimientos, las máquinas para todo, hoy me hice un ocho en el metro, no venden el boleto directo sino una máquina y bueno luego para salir del metro "para que te liberen" debo ponchar otra vez el tiquete ¡que locos!

Sin duda está es una ciudad hermosa, hay una parte de edificios gubernamentales grises y sin vida, pero hay otra cara más humana, de estas casas de dos pisos, con una puerta pequeña, pintada de colores rojo ladrillo, celeste o verde con un pequeño jardín a la entrada, como las de las pelis que no se me hace difícil imaginarme dentro leyendo un libro y tomando un café.
Barbería con un estilo muy clásico, una pintura de  negros al frente.
Está terminando el invierno, los palos están pelados, hace tanto frío que me marea, hoy vi unos árboles que se les desprendían de una a una las hojas estas de forma hermosa de estrellas y pensé igual que los árboles, mis procesos y los de otras mujeres nos siguen desnudando las ideas y el alma en este impactante encuentros de culturas.

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